Biografia

Stefano Di Renzo nació en Italia, donde se graduó en la carrera de Ingeniería. Tras finalizar sus estudios universitarios, se trasladó a España para realizar una formación profesional en artes circenses, teatro y danza en la Escuela Municipal de Circo de Alcorcón (EMCA) de Madrid. Posteriormente, se trasladó a Londres, donde se graduó en The Circus Space (actualmente National Centre for Circus Arts). Actualmente reside en Estocolmo, Suecia.

Tras obtener su título, fundó la compañía de teatro y circo Compañía LA junto a Rubén García Río. Su primera producción Hambre ha estado de gira internacional desde su estreno en 2006.

Su primer espectáculo  como solo artista  On My Way se estrenó en el Festival Mirabilia de Italia en 2012. Su segundo trabajo en solitario Hold On se estrenó en 2015 y continúa de gira por festivales de calle por toda Europa. Paralelamente al desarrollo de su práctica en solitario, ha colaborado con diversas compañías de teatro físico y circo de renombre internacional, como Ockham’s Razor, Theatre Rites, Company F.Z., The Generating Company y Oily Cart.


Enfoque artístico

A lo largo de su carrera artística, Stefano ha buscado una integración dinámica del circo y el teatro físico, examinando los posibles significados y el potencial narrativo a través del equilibrismo, la manipulación de objetos y el movimiento corporal.

Durante y después de su formación en Madrid y Londres, donde se especializó en cuerda floja, malabarismo y teatro físico, su investigación se centró en la interacción entre los intérpretes y los objetos cotidianos. Al recontextualizar estos objetos dentro de marcos teatrales, investigó la relación intérprete-objeto para mediar la narrativa y el significado en el escenario.

Con el tiempo, su metodología creativa evolucionó para incorporar su experiencia en ingeniería y montaje técnico. Este cambio marcó una transición del uso de objetos como herramientas narrativas a posicionar el diseño y la función de aparatos circenses no convencionales como punto de partida para la exploración teatral. El diseño de los aparatos se convirtió en un elemento generador, moldeando la dramaturgia y dictando el lenguaje escénico. Si bien su obra se mantiene basada en la teatralidad, se ve cada vez más impulsada por lo ya inherente al circo.